Cuando
uno decide que una película le interesa antes tiene que pasar por un proceso en
el que influyen tres factores bien diferenciados. El primero es el elenco que
participa en la película. Estamos hablando de actores, directores y ,en casos
muy especializados, productores, guionistas y encargados de bandas sonoras si
eres un erudito del tema.
El
segundo factor es la temática de la película, ya que dependiendo de cada
persona una comedia nos atraerá más que un drama o una película de acción. Y
por último (aquí es donde quería llegar) los elementos exógenos a la película.
Hago esta aclaración porque es evidente que dependiendo de lo que hayas oído de
una película vas a ir más o menos condicionado al cine.
Es por
eso que Kick Ass 2: Con un par no ha
cumplido todas mis expectativas. Claro que en este caso, tratándose de una
secuela, ese condicionamiento externo al film está más acentuado debido a que
la predecesora se convirtió en un título casi de culto y además estaba dirigida
por el siempre genial Matthew Vaughn.
Pero
bueno, Kick Ass 2: Con un par empieza
donde dejaba las cosas su predecesora. La
insensata valentía de Kick-Ass (Aaron Taylor-Johnson) ha inspirado a toda una
oleada de nuevos defensores del bien, dirigidos por el implacable Coronel
Barras y Estrellas (Jim Carrey), a quienes nuestro héroe decide unirse. Pero
cuando Bruma Roja (Christopher Mintz-Plasse), que regresa con el nombre de El
Hijoputa, decide deshacerse de esta panda de superhéroes aficionados, solo Hit
Girl (Chloë Grace Moretz) podrá impedir que los aniquile.
Tardé
más de lo deseado en ir al cine a ver esta comedia de acción (si, repito, principalmente
es una comedia) y me resultó casi imposible no empaparme de noticias
relacionadas con su calidad. Por un lado, las críticas que leía por todos los
lados (casi todas) eran geniales y en mucho casos llegué a leer que esta
secuela superaba a la cinta original (WTF? O.o).
Sin
embargo, en el otro lado de la balanza encontraba las cifras de taquilla. Tras
su estreno, la nuevas aventura Kick Ass no había conseguido llegar siquiera al
top diez de recaudación. Esto no quiere decir que la película sea mala, también
puede ser que no se haya publicitado con efectividad o que el producto no fuese
del interés del público español (cada vez con menos criterio a mi modo de ver),
pero de todas formas no era un dato que me diese confianza.
Al
contrario que en el film de Matthew Vaughn, Kick
Ass 2: Con un par se aleja más de el tono serio que predominaba en la
primera película. Bajo las órdenes de Jeff Wadlow (guionista también del film)
la trama, el tratamiento y todo lo que envuelve a la película se desmelena y da
rienda suelta a un festival de cachondeo, violencia explícita y chistes
grotescos.
Y esto…
¿Es bueno o es malo? Depende de cada persona. Es fácil entender por qué mucha
gente me dijo que la segunda parte le pareció mejor que la primera. Se podría
considerar que Kick Ass 2: Con Un Par
puede resultar más entretenida y amena para un público general que solo quiere
ir al cine para pasarlo bien (perdón si suena muy pedante, pero es así).
Sin
embargo, aunque a mí esta secuela me gustó, no me llego a entusiasmar como lo
hizo la primera parte allá por el 2010. Kick
Ass, además de ser un relato mucho más adulto y serio, poseía una potencia
narrativa y un manejo del ritmo apabullante que esta segunda parte no ha
logrado. Se ha echado mucho de menos la mano de Matthew Vaughn que esta vez ha
preferido quedarse como productor.
Por otro
lado, lo que posiblemente menos me gustó de la película fue el guion. No es que
en sí sea malo, pero a lo largo de todo el metraje tenía la sensación de que no
estaba ocurriendo nada. Simplemente no había una trama central potente o un
leitmotiv que alimentase a el conjunto. Salí con la sensación de que esta
secuela, sin ser mala, podía no haber existido sin mayor problema.
En el
apartado de los actores, encontramos a los mismos intérpretes con sus mismos
papeles sin más, ya que no ha habido una gran evolución de sus personajes, a
excepción de Chlöe Grace-Moretz, que intenta dotar a sus personaje de otros
matices más “adecuados” para una chica de 15 años. Por otro lado destacar el
papel de Jim Carrey, que aunque sale poco en la película, cuando aparece es
imposible que no salga una sonrisa en tu cara (a menos que seas de sus
detractores).
En
resumidas cuentas, Kick Ass 2: Con Un Par
es una buena película de entretenimiento en la que resulta casi imposible
pasártelo mal. Es cierto que no supera para nada a su primera parte, pero por
otro lado tampoco lo busca ya que el único propósito que tiene la cinta de Jeff
Waldow es entretener. Y eso lo consigue con creces. Puede que si la comparas
con la primera parte te quedes algo frío, pero es un entretenimiento muy digno.
PD: Lo mejor de la película es, sin duda, el cuadro de Nicolas Cage (Oh Nic Cage, te adoramos). Y la banda sonora, también.
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